Piensa el ladrón

¿Alguien no se sabe la continuación de este refrán en España? Pues eso, que piensa el ladrón que todos son de su condición... Qué sabio es el refranero español.

 

Recientemente en prensa hemos podido leer las barbaridades más absurdas respecto al proceso de adjudicación de las becas del programa "La Dipu te Beca".

 

Como sabéis, este programa que se lleva desarrollando unos años, se basa en unas bases que publica la misma Diputación de Valencia, y que cada Ayuntamiento adapta conforme a sus necesidades.

Las titulaciones se requieren por las diferentes jefaturas de la Casa, y el proceso de este año se puede calificar de objetivo, transparente y límpido, pese a quien pese.
 

A esta sección sindical le consta que en otros ejercicios, el proceso se llevaba a cabo en otras condiciones, sin Comisión formada por funcionarios, con el Concejal/a de turno, y poco más. De ahí salían las adjudicaciones de becas.

Sin embargo, este año se ha constituido una Comisión de Valoración en la que había siete funcionari@s que han actuado de forma independiente y objetiva. Valorando los méritos aportados por los aspirantes, y de dicha valoración, se levantó acta conforme al orden de puntuación y necesidades requeridas.

Tras más de cuatro sesiones intensas, en las que se ha reunido esta Comisión, se elevó acta con las adjudicaciones que tocaban. Ni una más ni una menos. Eran 66 las becas, y fueron 66 los aspirantes que consiguieron la beca en cuestión. Sin trampa ni cartón.

Hay quien se hincha a decir de todo, pero francamente, si en otros tiempos hubiéramos dicho nosotr@s, otro gallo hubiera cantado....

 

Si se mirara menos el ombligo de uno, y se viera más la realidad, sin manipulaciones, ni lecturas políticas de ningún tipo, no se intentaría desprestigiar el trabajo de siete funcionari@s.

Pero eso no es un titular de un periodicucho. Que se ha estado trabajando y se ha intentado hacer de la mejor manera, eso no es titular. Titular es que hay tongo... Lamentable si el discurso político de este municipio va encaminado hacia una senda muerta, plagada de mentiras y de proyecciones imaginarias...apañados estamos.

 

Como decíamos al principio, piensa el ladrón...